Fugaz
¿Quién puede permitirse el desvarío
en esta encrucijada de tiempo y ladrillo?
¿Acaso roer una y otra vez la rutina
de una geometría seca, pueda y deba,
exija y compre tu camino...?
No huyas Caracol, pronto será saliva tu sueño mejor
que de carcajada
y plumaje multicolor
llena la noche y tiñe tu caparazón.
No te ciegues con la meta vana
sobre la que Cronos teje su telaraña.
Pero...
Nunca quise solventar mi infamia
engañando prójimo, destripando rumbo
y esperanzas...
No soy quien, Caracol. No soy quien...
Fernando Álvarez 1998
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